HAPOEL DE TEL AVIT 0 -ATLÉTICO DE MADRID 3
El muro de las lamentaciones es el lugar sagrado más importante para los judíos. Se trata de los restos del Templo de Jerusalén, construido por Herodes en el año 20 antes de Cristo, el que fue destruido en el año 70 por los romanos. Entre las piedras que componen este muro, los fieles ponen pequeños papeles con sus peticiones. Se dice que el nombre del muro de las lamentaciones viene del hecho (más bien leyenda) en que el emperador romano Tito dejó en pie el muro con el objetivo de que el pueblo judío se lamentara de que los romanos los habían vencido. Por otra parte, para ellos, tomó el valor de una promesa hecha por Dios, en la que siempre quedaría al menos una pequeña parte del templo, en representación y como símbolo de que su alianza con este pueblo se mantendría por siempre.
Ya estoy cansado de las tonterias de los comentaristas deportivos y periodistas, que ejercen, por así decirlo, su labor en este país. Para ellos sólo existen dos equipos; el resto no vale o se menosprecia constantemente.
Ya estoy cansado del anti Atlético de Madrid que acompaña a Robinson en los partidos del Canal +, de los comentarios pro madridistas de la primera. Ayer solo me falto oír el chistecito que se marcó el comentarista de cuatro en el partido frente al Hapoel de Tel Avit, sobre que los dirigentes y jugadores del atlético habían ido al Muro de las Lamentaciones a Jerusalén a rezar para que nos saliera las cosas bien. Menos mal que Kiko Narvaez y el otro comentarista le cortaron y le hicieron rectificar al instante.
Pero bueno. Ya esta bien de sandeces y favoritismos, de menosprecios, de humillaciones. Estos juntaletras y come micrófonos deberían ser objetivos, pero esto y que critiquen la gestión de Miguel Ángel Gil y de Enrique Cerezo va a ser imposible, por lo menos a corto plazo.
Pues mirar "profesionales de la información" ¿Sabéis dónde estamos los Atléticos ahora más que os pese?. Estamos en el "Muro de los Alborozos" de "los gozos", de "las risas", de "las alegrías", de "las felicidades". Mientras vosotros, caverna mediática madridista, os convertís poco a poco en prensa amirillista, partidista, y os acercáis cada vez más al "Muro de la Lamentaciones". Esto también vale para la caverna barcelonista.
Sobre el partido, tranquilidad. Salió bien la apuesta de Simeone de la rotación, descanso, enchufe, o como lo queramos llamar. Los no habituales cumplieron. Algunos con creces. El Hapoel fue un equipo endeble, que no fue capaz de llamar a nuestros Lemures, pero si que empezó a santificar a jugadores denostados como Mario, Raúl Garcia, Diego Costa. Que empezó a contestarnos el por qué del fichaje de Emre. Que dejó claro quienes son los laterales titulares del Atleti, pese a que Cisma no jugó mal.
Se demostró que por ahora somo un equipo. Lo que ya es bastante.
Hala, hasta el lunes
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